martes, 14 de septiembre de 2010

~Under the moonlight.

  A través de los cristales, de la lluvia, de las montañas, allí estaba ella. Inmensa y brillante como nunca la había visto. Tiene algo mágico e hipnótico. Arriba en el cielo se alza majestuosa, reina de la noche. La miro fijamente, intentando ver algo más, pero no consigo ver nada. Cuando era una niña, me gustaba mirarla durante horas y con cada parpadeo veía una cara diferente. En cierta ocasión, mientras la miraba intentando no parpadear, hasta me pareció que me guiñaba un ojo cómplice. Sonrío para mis adentros. Ahora no veo más que sombras donde antes mi imaginación veía cosas maravillosas. Supongo que eso es crecer...
  Suspiro y vuelvo a contemplar su belleza como antes, como cuando era una niña. Me siento casi especial en medio de esa quietud de la noche, acunada por el viento susurrante y por los lentos latidos de mi corazón. Mi mente vuelve atrás sin remedio, a años muy lejanos en el tiempo, pero que mi corazón recuerda como si fuera ayer. Son tiempos pasados. Mejores, como dice la canción.
  Cierros los ojos con cansancio. Desearía poder volver a sonreír con tanta facilidad como antes, como cuando era una niñita despreocupada. Ahora, el peso de los años sobre mis hombros no me deja avanzar.